Nuestro amado Padre Celestial, fue fiel en todo momento, pues cada bendición llegó a su tiempo para cubrir los gastos y para atender cada programa.
El Gran Equipo de Trabajo que el Rey de Gloria nos concedió siempre presente a pesar del cansancio y la inversión de tiempo que se tuvo que hacer, sea en los teléfonos o en la cabina, siempre su apoyo y compañía fue muy especial.
El gran apoyo de nuestro hermano Gastón y la taquería el Rinconcito fue clave para el éxito de este esfuerzo evangelístico a favor de los miles de personas que nos escuchaban y que nos esperaban a las 2:00 de la madrugada. MUCHAS GRACIAS.
Muy pronto volveremos con Buenas Nuevas para anunciarlas por Radio Web y por la estación de radio que el Todopoderoso tenga a bien abrirnos. Bendiciones MINAP. Shalom.
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